ESCUELA NACIONAL DE GOBIERNO EN SALUD RAMÓN CARRILLO

Más allá de la formación oficial

La Escuela Nacional de Gobierno en Salud «Dr. Ramón Carrillo» funcionaba en la sede de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ANLIS- Malbrán).

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La formación de líderes es un paso ineludible para generar transformaciones en el sistema de salud. La Escuela Nacional de Gobierno en Salud “Ramón Carrillo” fue una iniciativa estatal para regir ese proceso. En un momento de resistencia y construcción, son otros los actores que deben coordinar sus acciones para llevarlo adelante.

Los procesos de transformación en salud requieren de un análisis cuidadoso de la realidad. Allí donde más demandas tiene una población, desde el hospital o los centros de salud deben desarrollarse acciones y definiciones acordes con ella. Los avances científicos y tecnológicos mejoran los procesos diagnósticos y terapéuticos pero no queda claro aún si también sirven para reducir brechas sociales. Las personas que conducen las instituciones tienen la oportunidad de articular las demandas sociales y las prácticas sanitarias. Pueden tejer alianzas estratégicas y tomar medidas para reducir (o profundizar) inequidades. Sin embargo, en los numerosos posgrados universitarios y de capacitación en servicio no se les proveen las herramientas necesarias para llevarlas a buen puerto. Aunque en la región y en el mundo se diseñaron e implementaron políticas que mejoraron el acceso a los servicios de salud, se perdieron muchas oportunidades por no priorizar la capacitación en los niveles de gestión.

¿Cómo aplicar nuevas normas que desafían lo instituido en la cultura de las instituciones? ¿Cómo evaluar su impacto? ¿Cómo detectar las nuevas necesidades que surgen de su implementación? ¿Cómo generar nuevas normas? ¿Cómo transformar la cultura institucional? ¿Cuáles son las claves para conseguir financiamiento en un contexto de las finanzas globalizadas? ¿Cómo transformar en puentes las barreras interculturales?

Para ofrecer algunas respuestas a esas preguntas, en octubre de 2015, mediante el decreto presidencial N° 2123/15 se creó la Escuela Nacional de Gobierno en Salud (ENAGS) “Ramón Carrillo”. Eran sus funciones:

a) Coordinar y ejercer la rectoría sobre la oferta educativa generada por los diversos programas y organismos descentralizados del Ministerio de Salud en los temas de su incumbencia;
b) Determinar sistemáticamente nuevas necesidades de capacitación de los técnicos y profesionales para la Gestión en Salud y generar cursos u otras actividades en consecuencia;
c) Formalizar convenios de colaboración docente y actividades conexas de la Escuela, con organismos públicos nacionales e internacionales;
d) Financiar e intervenir en las adjudicaciones de becas nacionales para el perfeccionamiento en el área de la Gestión en Salud, así como recabar y evaluar los informes y los resultados presentados por los becarios;
e) Promover redes interinstitucionales a fin de establecer agendas consensuadas para la formación de recursos humanos en el campo de la gestión, la salud pública y sus campos afines;
f) Implementar un sistema de información y comunicación sobre el Capital Humano en Salud, de disponibilidad nacional, con el objeto de mejorar la toma de decisiones e incrementar la equidad en su distribución y
g) Desarrollar el relevamiento de instituciones formadoras y de capacitación de los recursos humanos en salud.

La Escuela Nacional de Gobierno en Salud se propuso como un ente coordinador de las propuestas formativas dirigidas a personas con responsabilidad de conducción. Su principal objetivo era formar líderes capaces de trabajar con la contingencia de su cotidianeidad, aprovechando nuevas oportunidades para el desarrollo de las organizaciones y brindando capacitación de apoyo a las estrategias para la gestión del cambio. Para lograrlo, debía promover la educación permanente mediante cursos sobre temas generales, como la planificación estratégica o la administración sanitaria, y acerca de problemáticas puntuales y situadas, como la implementación de una red, la incorporación de tecnologías, la formulación de un presupuesto o la toma de decisiones. Para ello proponía el trabajo conjunto de equipos de actores sanitarios, técnicos y políticos al servicio de la comprensión del sistema de salud, sus reformas, su gestión y su administración. En este sentido, debía ser proveedora de herramientas y usina de nuevos conocimientos para la resolución práctica de problemas y conflictos del trabajo en salud. Es importante recalcar que, en principio, la Escuela de Gobierno en Salud establecía metas de capacitación a corto plazo, aun para aquellas controversias y problemáticas que luego requerirían mayor tiempo para ser resueltas.

 

Muchos de los vacíos en la formación sanitaria que la Escuela Nacional de Gobierno en Salud hizo evidentes continúan existiendo.

 

En febrero de 2016, a través del decreto presidencial N° 358/2016 la nueva gestión derogó el decreto de creación de la incipiente ENAGS, sosteniendo que resultaba necesario adecuar la organización ministerial con el propósito de tornar más eficiente la gestión pública, reorganizando los organismos y las funciones que resultaran necesarias. Fue uno de los primeros pasos del proceso de desguace que culminó, por el momento, con la desaparición del Ministerio de Salud.

Si bien la función rectora del Estado Nacional es irremplazable, muchos de los vacíos en la formación sanitaria que la ENAGS hizo evidentes continúan existiendo y hace falta que algún actor se ocupe de llenarlos. Para que un futuro gobierno nacional, popular y feminista pueda construir un sistema de salud justo e inclusivo es necesaria, además de la voluntad, la capacidad técnica para conducir el proceso. Por eso es que el guante de la Escuela de Gobierno en Salud puede y debe ser recogido por universidades, organizaciones gremiales, sociedades científicas, agrupaciones políticas y entidades de la sociedad civil. Establecer una escuela de gobierno en red puede ser una herramienta eficaz de resistencia y construcción. Explorar las necesidades de manera conjunta, coordinar las ofertas académicas y buscar la sinergia entre las diferentes propuestas es la misión del momento. Para volver mejores y más fuertes, es necesario llegar preparadxs con rigor científico, visión estratégica y pasión militante.

 

· Verónica González ·

Odontóloga, magíster en Salud Pública (UBA), Ex Asesora de la Secretaría de Políticas, Regulación e Institutos para la Escuela Nacional de Gobierno en Salud “Ramón Carrillo”, docente de posgrado “Planificación Estratégica”, miembro de ALAMES.