La relación entre el movimiento sindical y los derechos sociales está presente en el origen mismo del movimiento obrero. La defensa de la vida y la idea de salud como una construcción social y por lo tanto colectiva es un pilar básico y prioritario en las actividades de la Asociación de Trabajadores del Estado. Entendemos el derecho a la salud no solamente como el derecho a estar sano, sino como la necesidad de garantizar para todos y todas condiciones de vida digna que incluyen circunstancias de trabajo saludables y seguras, vivienda adecuada, alimentos sanos así como también la disponibilidad de servicios de salud.

Sostenemos la idea de que la salud es un asunto ético y político. Una dimensión esencial de la vida social y del orden político, como decía Floreal Ferrara: “El campo de la salud debe enraizarse en la historia del hombre y sus grupos sociales, abarcando el análisis concreto de las relaciones de producción que determinan las situaciones sociales, políticas, económicas, jurídicas, religiosas, culturales, que atentan o deterioran las posibilidades del bienestar de la población”.

La salud es también un derecho humano y social inalienable y por eso es responsabilidad indelegable del Estado garantizar su ejercicio a todos los que habitan nuestro suelo.

En la provincia de Santa Fe, la principal causa de muerte es la enfermedad cardiovascular. Según los últimos datos disponibles, las cinco principales causas de muerte en esta provincia son las enfermedades cardiovasculares (que incluyen a los ACV y otros eventos cerebrovasculares), los tumores malignos, las enfermedades respiratorias (infecciones respiratorias agudas y enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores), las causas externas (accidentes, suicidios y agresiones) y, en quinto lugar, la diabetes.

Los datos de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR) de 2009, revelaron un incremento del sedentarismo, la obesidad, la hipertensión arterial, la diabetes y el colesterol elevado. Al mismo tiempo, mostraron una disminución del consumo de tabaco y de exposición pasiva al humo ajeno. Desde entonces, salvo la obesidad (que continúa en aumento), la prevalencia de estos factores se ha mantenido estable. La última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo realizada en el año 2013 arroja entre otros datos que: 2 de cada 10 personas evaluaron su salud como mala o regular. 4 de cada 10 personas presentaron sobrepeso y 2 de cada 10, obesidad. 9 de cada 10 adultos se controlaron la presión arterial en los últimos 2 años, y de ellos, 1 de cada 3 presentó hipertensión así como 8 cada 10 personas se midieron alguna vez el colesterol, y de ellas, un tercio manifestó tener colesterol elevado.

El Instituto Autárquico Provincial de Obra Social de la provincia de Santa Fe (Iapos), junto con ATE, comenzó en 2017 un relevamiento en las principales reparticiones públicas de la ciudad capital, con el objeto de detectar los factores de riesgo cardiovascular entre trabajadores de la administración pública santafesina, en el marco de un proceso de concientización respecto del autocuidado de la salud.

Esta revisión de datos mínimos sanitarios -llamado screening cardiovascular- es la primera parte del Programa de Prevención de Enfermedades Cardiovasculares de la Obra Social que permite categorizar a la persona según su nivel de riesgo y, en función de éste, definir el modelo de atención integral que requiere; busca implementar un modelo de atención enfocado en la promoción de la salud -con una mirada centrada en el paciente y su familia- que propicie nuevas alternativas de apoyo y acompañamiento sanitario ya que, en muchos casos, los factores que favorecen el desarrollo de estas enfermedades son prevenibles y/o tratables. Acrecientan las posibilidades de enfermedades cardiovasculares la edad, la hipertensión arterial, el tabaquismo, el colesterol, el sedentarismo, la mala alimentación y el estrés. Cuando estos factores interactúan, potencian sus efectos. Además, el riesgo cardiovascular se incrementa cuando se padecen otras enfermedades como la diabetes.

A propósito de esto, la clave para mejorar nuestra calidad de vida y prevenir los factores de riesgo cardiovascular es el autocuidado, es decir, todas las acciones que pueden evitar, retrasar o causar menor impacto en el desarrollo de enfermedades, complementados por controles profesionales integrales de manera periódica.

De una primera muestra de 2878 trabajadores que realizaron el screening cardiovascular en su lugar de trabajo, se obtuvieron los siguientes datos: el 62,84% evidencia índices de sobrepeso, el 34,10% presenta valores mayores al normal de glucemia en sangre, el 56,71% no consume frutas en la proporción adecuada y el 40,91% ingiere menor cantidad de verduras que lo aconsejado. El 38,7% de la población relevada es sedentaria y solo un 33% realiza actividades físicas en forma óptima. Casi el 20% de los empleados públicos fuma y el 25% agrega sal a la comida.

 

ATE Santa Fe se encuentra fuertemente comprometida en resaltar la importancia de la prevención y del cuidado de la salud de las trabajadoras y los trabajadores públicos.

 

La atención de personas con enfermedades crónicas no transmisibles requiere pasar de un modelo reactivo, centrado en la enfermedad, a un modelo proactivo y planificado, centrado en la persona y su contexto. Un modelo que garantice una buena calidad de atención, facilite el seguimiento longitudinal, favorezca la participación activa de la persona con enfermedad crónica y promueva la adherencia al tratamiento.

Bajo esta premisa, y siguiendo las recomendaciones de la Organización Panamericana de la Salud, La Asociación de trabajadores del Estado abrió el “Centro de Atención Orientado al Paciente”, adoptando un modelo de cuidados crónicos, basado en cinco pilares fundamentales:

• Profesionales con las herramientas más adecuadas para el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares con base en el análisis de riesgo global.
• Enfoque en el automanejo y autocuidado por parte de los pacientes.
• Sistemas complementarios de información y comunicación con los pacientes.
• Organización de servicios para facilitar cuidados cotidianos: turnos programados, gestión de historia clínica centralizada, planes prestacionales, seguimiento y continuidad de la atención.
• Actividades Terapéuticas Complementarias.

Conforme el modelo de cuidados crónicos, el modelo de atención está centrado en el paciente. Para lograr una visión integral e interdisciplinaria, el Centro dispone de la infraestructura necesaria y un conjunto de recursos técnicos clave, entre los que se destacan:

• Sistema de Historia Clínica Centralizada (provisto por IAPOS).
• Planilla para el monitoreo de pacientes crónicos.
• Métodos diagnósticos digitalizados.
• Tecnologías de la información y la comunicación para el seguimiento y control.
• Espacios para la realización de actividades educativas y de promoción de la salud y el autocuidado.
• Sistema de gestión administrativa ágil y eficiente, para un contacto fluido y directo con los pacientes. Gestión de turnos programados, solicitados presencialmente, por teléfono, sms, whatsapp o vía web. Atención integral en espacios adecuados para el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de los pacientes.
• Tiempos de espera reducidos para el paciente.
• Entrega de resultados en tiempos breves y seguimiento en consulta integral explicativa.

Objetivos

Las acciones del Centro tienen como propósito:

• El abordaje integral de las enfermedades cardiovasculares, con intervenciones centradas en el manejo de guías de práctica clínica, basadas en evidencia científica y el riesgo global de enfermedad, para que impacten directamente en la vida de cada paciente.
• El control del riesgo cardiovascular (hipertensión, colesterol y diabetes) y el manejo de enfermedades cardiovasculares, mediante la atención en consultorio por especialistas con una mirada interdisciplinaria y global.
• La promoción de la actividad física, la lucha contra el sedentarismo mediante el fomento del deporte, las actividades físicas en la vida cotidiana, y los programas especiales organizados en el Predio UNL-ATE en salones adecuados para tal fin: el Centro Cultural ATE-Casa España y en el Hotel UNL-ATE.
• La promoción de una alimentación saludable y reducción de la obesidad mediante consultorios dedicados al diagnóstico y tratamiento de la obesidad; la difusión de guías alimentarias, la ejecución de programas interdisciplinarios para la mejora en la alimentación en los lugares de trabajo y el fomento de consumo de frutas y verduras.
• El tratamiento de la adicción al tabaco, mediante un equipo interdisciplinario de atención, talleres educativos para dejar de fumar y acciones de promoción de ambientes libres de humo.
• La educación de los pacientes, mediante campañas de comunicación, materiales educativos y guías promoción de hábitos saludables.

Líneas de trabajo

Los servicios prestados por el Centro se organizan en cuatro líneas de trabajo:

• Evaluación preventiva. Tiene por finalidad conocer el estado general de salud de las personas, para detectar y corregir factores de riesgo, promoviendo la salud mediante el fomento de hábitos saludables, y realizar –eventualmente- una adecuada detección de la enfermedad.
• Promoción de la salud. El Centro cuenta con el apoyo de un equipo interdisciplinario dedicado a la promoción de la salud y al fomento de hábitos saludables y de autocuidado, mediante acciones de educación y difusión de materiales gráficos y aplicaciones web.
• Atención de pacientes con enfermedades cardiovasculares. Busca generar el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la enfermedad y la instrumentación de tratamientos paliativos. La atención es integral, se enfoca en la visión global del riesgo y está a cargo de un equipo interdisciplinario con especialistas designados según los factores y/o enfermedades abordadas.
• Fortalecimiento de la adherencia. Son acciones tendientes a individualizar la intervención (adaptándola a las circunstancias y dificultades de cada paciente, teniendo en cuenta los aspectos de su vida cotidiana) y a establecer un vínculo de confianza con la persona para que pueda expresar sus dudas, preocupaciones o dificultades para adherir al tratamiento. Todo esto en el marco de un trabajo interdisciplinario que involucra al equipo médico, al personal de admisión y enfermería, y a los profesionales encargados del dictado de los talleres educativos.

Sistema de call center

El personal de admisión dispone de una central telefónica con líneas rotativas para la recepción de turnos, la atención de las consultas de los pacientes, y su derivación al equipo médico.

A su vez, el equipo médico y de admisión cuenta con el apoyo de un call center para el refuerzo de la adherencia terapéutica. Éste tiene su base física en la sede gremial y cuenta con líneas telefónicas rotativas (fijas y móviles), computdoras con conexión a internet, lo que permite una comunicación ágil (por teléfono, e-mail, whatsapp, o sms) para el envío de materiales educativos, la difusión de aplicaciones, y el recordatorio de turnos. Toda la información se almacena en un sistema de registro que permite la recuperación del historial de comunicaciones con el paciente y el monitoreo de los resultados.

Los operadores están capacitados en el modelo de abordaje integral de enfermedades crónicas no transmisibles, y cuentan con tecnologías de gestión que permiten registrar y recuperar el historial de comunicaciones para individualizar a los pacientes y generar con ellos un vínculo de confianza. Además, toda la información concerniente a la comunicación con los pacientes es accesible a los miembros del equipo médico y de admisión, como insumo complementario para el seguimiento y evaluación de la adherencia al tratamiento.

La Asociación de Trabajadores del Estado se encuentra fuertemente comprometida en resaltar la importancia de la prevención y del cuidado de la salud de las trabajadoras y los trabajadores públicos.

 

 · Silvia González, Andrés Camissi y Patricio Rodríguez Salgado ·

Equipo Coordinador del Centro de Salud orientado al paciente de ATE Santa Fe.